El partido en Orlando comenzó tras una fuerte tormenta eléctrica.
Ambos equipos saltaron al campo con una combinación de jugadores del primer equipo y de la cantera, todavía con un buen número de futbolistas disfrutando de descanso tras su paso por la Eurocopa.
El City comenzó fuerte, manteniendo la posesión durante los primeros compases, pero el recién nombrado Hansi Flick vio a su equipo crecer rápidamente.
Y el Barcelona se adelantó en el marcador, en el minuto 24, con un gol de Pau Víctor.
El City creció tras el gol y la insistencia tuvo premio con el gol del empate de Nico O’Reilly.
Joško Gvardiol puso un magnífico balón al área y el jugador del EDS controló y definió cruzado en un rápido movimiento.
Pero cuando parecía que el partido se marcharía igualada al descanso, Pablo Torre puso de nuevo a los azulgrana por delante, con una gran acción individual en el borde del área.
A los 15 minutos de la reanudación tiempo, una brillante transición de Mateo Kovačić abrió la defensa del Barcelona. El croata sirvió para Jack Grealish y el ‘10’ definió con un potente zurdazo.
Ninguno de los equipos pudo encontrar el gol de la victoria y el partido pasó directamente a la tanda de penaltis para decidir el ganador, en la que el Barcelona se impuso 4-1.