Abril empezó con un varapalo. La ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones se disputaría en Anfield, donde los sky blues solo han ganado una vez en 37 años. Sin embargo, la excelente racha de los hombres de Pep Guardiola dejaba entrever el final de esta maldición. Y así lo pareció durante el inicio del encuentro, cuando los mancunianos empezaban a dominar el juego. Pero en menos de 20 minutos, el Liverpool anotó tres goles que, al remate, resultarían insalvables.
Mohamed Salah abrió el marcador a los doce minutos, antes de que Alex Oxlade-Chamberlain doblara la ventaja de los de Merseyside con un disparo lejano. Un minuto después, Salah volvió a ser decisivo, ya que su centro lo remató Sadio Mané para zanjar prácticamente la eliminatoria.
Fue el primero de una serie de grandes partidos. Tres días después el Etihad Stadium acogió el derbi frente al Manchester United. Los tres puntos convertirían al City en campeón de liga.
Los primeros 45 minutos hicieron pensar que eso sería lo que terminaría sucediendo. El capitán Vincent Kompany abrió el marcador en el minuto 25 con un cabezazo certero muy similar al famoso gol que él mismo logró ante el United en 2012.
Cinco minutos después, Raheem Sterling conectó con Ilkay Gündogan, que se volvió sobre sí mismo en el área antes de anotar el segundo gol del partido.
El título parecía atado. Quizá debió estarlo, pues antes del fin del primer tiempo, los locales gozaron de ocasiones para hacerlo.
Llegó el descanso. Y después la sorpresa. Paul Pogba marcó dos goles en dos minutos para cambiar radicalmente la cara al partido. El City aún no se había repuesto de sendos golpes cuando llegó un tercero. Chris Smalling cabeceó para dar la vuelta al marcador y retrasar las celebraciones del Manchester City, que tuvo que esperar una semana más para ganar la Premier League.
Antes de hacerlo había que resolver el pase a las semifinales de la Liga de Campeones. Los de Pep Guardiola necesitaban marcar pronto para ganar opciones de remontar la eliminatoria ante el Liverpool, y Gabriel Jesus lo consiguió. El brasileño anotó antes de llegar al segundo minuto de juego, y el City parecía tomar el control absoluto de la situación. Leroy Sané marcó justo antes del descanso, pero lo hizo en fuera de juego y el tanto no subió al marcador.
Habría que seguir intentándolo en el segundo tiempo, y las huestes celestes buscaron con mayor ímpetu la portería rival. Esto lo aprovechó el Liverpool para resolver el partido al contragolpe. Mohamed Salah fue el encargado de empatar, y Firmino de dar la puntilla final.
Siete días dramáticos. La fortuna no acompañó a un Manchester City, que no pudo volver a sonreír hasta el final de esa misma semana, cuando regresó a Wembley para imponerse a un Tottenham que llegaba en buena forma. Los de Mauricio Pochettino eran una amenaza sería, pero los de Pep Guardiola demostraron su fortaleza mental dando una clase maestra de juego ofensivo.
Los Spurs solo pudieron perseguir sombras. Nada más. El dominio visitante encontró su recompensa en el minuto 22 con un gol de Gabriel Jesus, y en el 25, Ilkay Gündogan marcó desde los once metros.
Pese a que Christian Eriksen redujo la ventaja con un tanto de rebote justo antes del descanso, la victoria nunca peligró. Y Raheem Sterling, que había buscado el gol durante todo el choque, lo encontró a falta de un cuarto de hora para el final del partido al cazar un rechace de Hugo Lloris y batir al meta francés desde cerca.
Toda la atención se concentró en Old Trafford el día siguiente. El United recibía al colista, pero el West Brom sorprendió y venció. El gol de Jay Rodríguez en el minuto 73 dio el pistoletazo de salida a las celebraciones de los jugadores, empleados y aficionados del Manchester City, pues habían ganado, de forma oficial, la Premier League 2017/18.
Siete días después, las ganas de fiesta seguían bien vivas. El Swansea visitó el Etihad Stadium y el flamante nuevo campeón de la Premier League marcó cuatro tantos a través de David Silva, Raheem Sterling, Kevin De Bruyne, Bernardo Silva y Gabriel Jesus para celebrar la tercera liga en siete años.
Fue un mes frenético, que terminó en casa del West Ham, donde logró la 30ª victoria de la temporada, igualando el récord de mayor número de triunfos que poseía el Chelsea desde la temporada 2016/17.
Fue una nueva exhibición de estilo y equilibrio. Pura clase. Leroy Sané marcó antes de llegar al primer cuarto de hora del partido, antes de que el City llegara al centenar de goles a través de Pablo Zabaleta. El exfutbolista del Manchester City, ahora en las filas del West Ham, anotó en propia meta en el minuto27 del partido.
Aaron Cresswell marcó con un tiro libre justo antes del descanso para que la afición del este de Londres creyera en que los suyos podrían sacar un resultado positivo. Pero los brasileños Gabriel Jesus y Fernandinho sentenciaron en el segundo tiempo.
Abril empezó con malas sensaciones, pero terminó con las mejores posibles. Con un City campeón.
