El Manchester City se impuso al vigente campeón de la Premier League en un encuentro que dominó de principio a fin.
El City salió decidido. Aunque tardaron en llegar las ocasiones, el control en cada faceta del juego fue para los locales. La posesión era suya, y cuando la perdían, los hombres de Guardiola acosaban a su rival hasta ganar de nuevo el balón.
La superioridad de los locales no encontró premio en el primer tiempo. Pero sí a los 35 segundos del segundo. Sergio Agüero se ghizo con un balón en el área rival y lo cedió a David Silva, que llegaba en carrerar. El español colgó el esférico antes de llegar a la línea de fondo y Bernardo Silva lo envió a la red en el segundo poste.
No hubo cambio de guión. Ni reacción inmediata de los londinenses. Los cityzens hicieron que corriera el balón, y los pensioners iban detrás.
